Estoy aquí, alejado de todo indicio de la cilivización, donde su paso solo ha sido marcado con la carretera por la cual yo voy a 160 km/h. un lugar alejado de la mano de Dios... ¿o no?
"¡Venga, tío, acelera más, tengo mejores experiencias en el quirófano que contigo al volante!"
Tiro la lata a la cuneta y esta se queda atrás al igual que esos palos que marcan la sucesión de 50 metros... mojones, así los llamaba mi padre, ja, mojones...
Este es el sitio...
Sí, este es mi sitio. Me estoy alejando de toda persona que pueda admirar mi divinidad. Es cierto, estoy cansado de que todos se queden con cara de borreguitos cada vez que yo haga algo o mencione algo. Que si hago tal, que si hago cual... Aunque, a veces, esto me llena de poder. Si, eso, leí en un libro que la medida de poder de un ser mitológico era la creencia de la gente en él. La gente no solo cree en mi, me alaban totalmente. Me siento arriba del todo, donde para mirar a alguien tengo que dirigir la vista al hueco que hay entre mis zapatos. Soy un gigantes entre hormigas, como el niño que con la lupa puede quemar a la que no le gusta y dejar las que le interesa. Sí, en cualquier momento, puedo aplasar a cualquiera. Pero yo no soy tan malo, que lo sepais ¿eh?
"Ostia, tío, me he dejado atrás el bronceador... pásame cerveza"
Junto a mi, como conductor, está mi profeta. Es un tío genial, tan genial que aún no me he tirado a su madre como favor. En cualquier momeno lo tengo a mi mando para que predique mi palabra y me ayude proclamarla, yo no estoy huyendo, sencillamente se cumple la ley de "el jefe no se ausenta, solo reclaman su presencia en otro lugar". Y así es, vamos a una población para comunicarles el verdadero camino, mi camino. A todo aquel que se me ponga chulo le daré una paliza "tío, llevo toda mi vida haciendo kick-boxing, tendrías que haberlo sabido por mi cara, sí, ahora no me pidas ayuda..." y a las mejores chatis, por supuesto, sin una mota de grasas, con buenas curvas, eso sí "¡nena, cabalgaremos juntos hacia el éxtasis! ¿mi número? por supuesto, toma este, total, es el de mi primo con el que nunca me hablo...". Solo voy a rodearme de los tipos más fieles, que sigan mi mandato, y de las chicas más dóciles y "neumáticas". Por supuesto, sin una mota de grasa, buenas curvas...
Soy imparable, voy a hacer de este país un lugar nuevo, y después, el mundo, jajaja, nadie me puede parar, ni siquiera ese policía con la sirena puesta que nos sigue. Pst, se cree que nos intimida, iluso...
"¡Vengá, tío, acelera, falta poco para atravesar la barrera y llegar al cielo!"
Oh, mierda, me duele la cabeza. Creo que voy a necesitar "automedicarme", incluso la gente superior como yo necesitamos tomar cosas mundanas para poder mantener nuestra esencia sin alterar en este plano.
"¡eh, mira, el policia se para! pero tu no frenes, ya falta poco para ver el paraíso..."
Y allí nos esperan mis nuevos subditos, y esas chicas dóciles, sin una mota de grasa, con curvas...oooh, sí, esto es lo bueno...
¿Qué? No, no soy egocéntrico, ni manipulador, ni machista, tan solo soy realista. No me creo superior, soy superior, no soy manipulador, la gente quiere seguir mis pasos, y no soy machista ¡son ellas las que me quiere!
¿Acaso tu no seguirías un tipo como yo? guapo, inteligente, fuerte, rápido... son los adjetivos que me definen, y ninguno de ellos malo ¿y eso por qué? muy sencillo, soy un ser el cual el destino lleva por el buen camino, un ser dichado, el destino es mio porque soy divino, sí...¡Soy un Dios! jajaja...
"ey, tío, que nos vamos fuera...tío, no te duermas, ¡tío!¡Me cago en la pu...!"
miércoles, 1 de octubre de 2008
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